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La abeja:
Nuestro obrero mejor cualificado
La abeja:
Nuestro obrero mejor cualificado
Existen más de 20.000 especies conocidas de abejas.
Las abejas son los polinizadores más importantes de las flores.
Se calcula que la tercera parte de los alimentos humanos son polinizados por insectos, fundamentalmente abejas.
La mayoría de las abejas son de cuerpo velludo con pelos plumosos
Llevan una carga electrostática ayudando a que el polen se adhiera a su cuerpo transfiriendo con sus patas el polen a las canastas de polen.
Algunas especies de abejas colectan polen de unas pocas especies de plantas
Siendo más especializadas, otras sin embargo visitan muchos tipos de flores, pero en general visitan flores de una sola especie por un período de tiempo antes de ir a otra especie, siendo positivo para las plantas que requieren polen de la misma especie para su fecundación.
Cuando una abeja descubre un punto donde alimentarse
Se lo comunica a las demás haciendo una especie de danza circular en el interior de la colmena y, según sea, así conocerán el lugar donde se encuentra, cerca o lejos, y la dirección de la misma, en función de la posición del sol.
Una colmena está formada por:
La Reina, cuya misión es la de poner huevos, llegando a superar los 1.500 huevos diarios; las Abejas Obreras, cuya misión es buscar el alimento, alimentar las larvas y limpiar la colmena, y los Zánganos, cuya única misión es la de fecundar a la reina.
Las obreras, hembras no fecundables, son continuas trabajadoras
Cuidan de las larvas que van naciendo, mantienen limpia y en orden la colmena, recolectan el polen para transformarlo en miel y alimentarse, y son las defensoras de su reina por la cual dan la vida. Poseen un aguijón que utilizan en casos extremos.
Las abejas, al contrario de lo que se piensa
son dóciles y solo se defienden cuando se sienten atacadas; incluso conocen a su apicultor y le aprecian.
Los zánganos no colaboran en ningún trabajo de la colmena:
no recolectan polen ni se preocupan de mantenerla limpia y en orden, por lo que una vez cumplida su misión de fecundar a la reina son expulsados de la colmena, dejándoles morir en el exterior. No poseen aguijón, por lo que al contrario de las obreras, no pueden picar.
Normalmente se les va la vida cuando se sienten obligadas a atacar
pues muchas veces cuando clavan el aguijón éste suele quedar enganchado, por lo que al abandonar el ataque pierden parte del intestino produciéndoles la muerte.
La abeja y el trabajo que realiza tienen un extraordinario valor
Ya que además de fabricar cera y miel, también genera un inestimable efecto polinizando las plantas y favoreciendo las cosechas.